fbpx

Mas a los hijos de Barzilai galaadita harás misericordia, que sean de los convidados a tu mesa; porque ellos vinieron de esta manera a mí, cuando iba huyendo de Absalón tu hermano.

1 Reyes 2:7

David sabe que pronto morirá y comienza a dar indicaciones a Salomón que ahora es rey y le habla sobre Barzilai, un hombre rico de Galaad e íntimo amigo de David.

Durante la rebelión de Absalón, cuando el rey huyó, Barzilai llevó provisiones a David y a su ejército y después de la victoria sobre Absalón, acompañó al rey en su regreso y fue invitado a formar parte de la corte real, pero rehusó la invitación por causa de su edad, solicitando que su hijo fuera en su lugar.

La generosidad de este hombre y su amistad con el padre de Salomón provocó que sus hijos se sentaran a la mesa del rey y fueran tratados con benevolencia.

Si bien usted y yo no obtenemos la salvación por obras, sino por gracia, nuestras obras sí deben reflejar la gracia que hemos recibido.

La generosidad, la hospitalidad y la gratitud son agradables para Dios y hace que Él y su Hijo nos miren con benevolencia y que alcancemos misericordia.

¿Le gustaría ocupar un lugar en el corazón del Padre? Antes de buscar Su dádiva, busque Su amistad para que cuando el Hijo se siente en el trono, sea invitado a disfrutar del banquete en Su mesa.

Aprendamos de Barzilai a honrar a nuestras autoridades pero sobre todo a ayudar a nuestros amigos cuando éstos se encuentren en desgracia, que nuestras buenas obras sean un reflejo de tanto amor que nos ha dado el Padre a través de su Hijo: Jesucristo.

// Castillo del Rey Santiago: Haciendo de cada creyente un discípulo //