Luego el Espíritu de Dios llevó a Jesús al desierto, para que el diablo tratara de hacerlo caer en sus trampas. Mateo 4:1 TLA

El mismo Espíritu de Dios llevó a Jesús a la prueba, donde Satanás tenía trampas preparadas, pero Dios había preparado a su Hijo para no caer en ellas.

¿Te has sentido rodeado de trampas?

Mira que si Jesús estuvo siendo tentado una y otra vez, tú y yo con mayor razón seremos tentados.

El enemigo anda alrededor, buscando a quién devorar, y Dios le ha dado permiso de zarandearnos, pero Jesús intercede por nosotros para que no nos falte la fe y salgamos victoriosos de cada crisis que estamos viviendo.
Jesús se enfrentó a 3 trampas en el desierto con un propósito: ¡iniciar su glorioso ministerio!

Tú y yo enfrentaremos estas trampas también para llevar al cabo el propósito de Dios y vamos a darte 3 claves de la Escritura que Jesús vivió y venció para que tú también puedas hacer lo mismo:

1 La trampa de la carne, que busca que te satisfagas a ti mismo de forma egoísta.

Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre. Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan. Mateo 4:2-3

2 La trampa del mundo, que tuerce la palabra de Dios para que continúes pecando.

Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y, en sus manos te sostendrán, para que no tropieces con tu pie en piedra. Mateo 4:5-6

3 La trampa del diablo, que hace que no adores a Dios y termines adorándolo a Satanás.

Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares. Mateo 4:8-9

Si has comenzado a ver las trampas alrededor, Dios te ha dado la capacidad de no caer en ellas a través de lo que Jesús hizo, pero si ya caíste en una, también tiene su brazo extendido para ayudarte y su mano está a un clamor tuyo para que venga a rescatarte.

He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas. Mateo 10:16

Si el diablo intentó hacer caer a Jesús en sus trampas, puedes estar seguro que lo intentará también contigo y conmigo. Sé prudente y sencillo, como Jesús.

// Castillo del Rey Santiago: Haciendo de cada creyente un discípulo //